Cuaderno de campo

La ex-cultura de hoy, denominada «Registro de fitosanitarios» o «Cuaderno de campo» muestra (una vez más, paciencia) a Teresa de Jesús en una de sus facetas más desconocidas. Viajemos a la época postmedieval (hagan «fiuuuuu»), a un pueblecito llamado Gotarrendura, a cuatro leguas al norte de Ávila…

La familia de Santa Teresa tenía una casa solariega en esta localidad, y la pequeña Tere pasaba allí largas temporadas(1). Los Cepeda tenían -entre otras propiedades agrícolas- un palomar; citado por ella en sus escritos con nostalgia. Y por aquí llegamos a la estatua de hoy. Como todo agricultor de la Unión Europea, Teresa debía rellenar el documento conocido como Registro de Fitosanitarios, también llamado «Cuaderno de Campo Agrícola»; en este documento se registraban todos los potingues, emplastes y ungüentos destinados al saneamiento de plantaciones y cabañas ganaderas. El documento debía estar disponible ante una inspección inesperada de la Inquisición…

Si conoces la referencia, también eres postmedieval.

Teresa, muy concienzuda y adelantada a su tiempo, ya anotaba (véanla con pluma en mano, qué abnegación) en una libreta todos aquellos mejunjes y purgaciones que proporcionaba a las palomas, animal promiscuo y propenso a contraer parásitos. Estas dotes organizativas le servirían para la gran empresa fundacional que acometería en su madurez.

El monumento se ubica en la Plaza de la Santa (no confundir con la Plaza de Santa Teresa, en Ávila somos la leche de originales en esto de los monumentos y las calles). Esta plaza es en la que está la Iglesia de Santa Teresa, y su Casa-Museo, edificado sobre una de las casas en las que nació (la otra está en Gotarrendura, of course).

Bola extra: al fondo de la imagen pueden contemplar -intencionalmente borroso- un pedestal con un pequeño busto oscuro, en el rincón de la plaza; que trataremos en una próxima entrada.

Bola extra 2: ¿Os pensábais que lo del Contador de Teresas era coña?

1: De hecho, es posible que Teresa naciera en Gotarrendura. Si visitan el pueblo acepten esta versión o pueden ir de un vuelo al pilón. Según los estudiosos, es menos probable que la otra versión (Ávila), pero el caso es que no existe anotación de su bautismo en ninguno de los dos registros. ¿Nacería realmente en Cataluña?

¿Han leído la primera parte de esta historia? Si no es así, vayan un momentito, que les esperamos aquí. ¿Ya? Pues vamos con la secuela que se nos anunciaba como cebo al final del anterior episodio. Sin más preámbulo, vamos a ver la primera página de la carta dirigida a la «Excelsa dama» (sic).

Primera página de la carta a Ana Pastor

Ya podemos intuir desde el primer compás que Efe no descansa en su labor de vigilancia de la Españolidad. Escribir cartas de «alerta» o de «emergencia» le debe llevar todas las horas del día. Bueno, de vez en cuando saca tiempo para poner en su sitio a los anti-españoles como mi padre. Pero centrémonos: Efe sólo encuentra consuelo en Dª Ana Pastor Julián y, quizás, en Dª Isabel García Tejerina. Sí, yo también he tenido que ir a mirar quién era: ministra de Agricultura en el gabinete de M. Rajoy. Mariano, que no hace más que recibir misivas de Efe e ignorarlas. ¿Por qué, Mariano? Ríndete a la evidencia: no ganaste las elecciones, las perdió Zapatero. Mas las hostias a Mariano suben de nivel en la siguiente página.

Segunda página. Tiembla, Mariano.

Si mi abuela tuviera ruedas sería una bicicleta y si los votantes del PP hubieran votado a Ciudadanos —ah, todo en esta carta es taaaaan 2016—, Ciudadanos habría ganado al PP. No, si el razonamiento es impecable… Y ahora la que, probablemente, sea la causa de que Mariano no conteste a Efe.

¿Pero yo qué le he hecho a este señor?

Los cargos están claros, Mariano. Se te acusa de: VAGO, COBARDE, TRAIDOR Y PERJURO. Y que esto no es una opinión, se trata de HECHOS. Ya, yo tampoco contestaría a tan gruesas palabras. Pero Efe está todavía por ofrecernos lo mejor en la recta final. Atentos al demarraje, que aquí pilla to’ Dios.

Tercera página. Aquí hay tomate.

Primero acusa al «anterior Jefe del Estado» —típica perífrasis para no decir Campechano— de comisionista. Luego sospecha que el «actual Jefe del Estado» —típica perífrasis para no decir Preparado— pueda no ser de fiar. ¿Por qué? Porque el Preparado actual Jefe del Estado se ha encamado con la Horda Roja.

La rojilla del Prestige.

Rajoy es un perjuro, los sindicalistas unos corruptos y la cúpula militar una banda de castrados y pusilánimes que se está rascando la barriga. La culpa de todo la tiene el Pelargón, claro. Los españoles de pura cepa criados a base de teta materna ya se habrían «alzado».

Pelargón, la verdadera causa de los males de Españñña.

¿Y habría alguna solución a todo esto? Efe nos da la clave en la ultima sentencia de la misiva: un gobierno conjunto de Pedro Sánchez y un tal Alberto Rivera —¿he dicho ya que todo en la carta es taaaan 2016?—. Y Rajoy echando una manita si quiere, pero sin ser presidente.

Alberto y Pedro. Ah, pedazo de shippeo.

Llegados al final de la estrambótica epístola sólo me queda una inquietud. ¿Recuerdan el final de la otra carta? Allí se afirmaba que de las 35 copias enviadas se había recibido respuesta a tres de ellas: de Ana Pastor, de Rita Barberá y de Santiago Abascal. Daría pasta por echarles un ojo…

Banda sonora recomendada
Perritos Industriales

Se pensarán ustedes que yo me invento las cosas que pongo, pero no. La escultura de fierro morroñoso que contemplan vuesas mercedes en esta imagen es el monumento a los perritos (industriales). Esa figura que si se mira de lejos y por el otro lao parece una € del euro rara, en realidad es un homenaje a esta profesión. Simboliza un regulador de velocidad con sus pelotas (centrífugas) sobre un imán en forma de U, de esos que salían en Mortadelo y Filemón con un poder atractivo mayor que el de una legión de vacunados del covid (recuerden, somos Clever & Smart City).

Jracias a que cuando yo estudié (es un decir) informática, compartíamos edificio con los perritos industriales pucelanos, he podido entender esta hovra de harte. Ya entonces eran muy raros, a veces se venían a las clases de informática porque ¡teníamos chicas! Los perritos venían babeando, como los de Paulov. Ahora a los perritos industriales se les llama de otra manera, no sé si hinginieros trésnicos, ni siquiera sé si todavía existen, con esto de que ahora todo son jrados y máxters.

Alguien pensó que era buena idea ponerlo así como medio tumbao y en mitad de una rotonda, una de las que se ubican en la Ctra de Valladolid, al lado de la fábrica de fragonetas de nuestra localidad. El monumento sólo tiene sentido para los miembros del Colegio Oficial de Perritos de Algún Sitio (pues se asimila a su logotipo), para el resto de los mortales es un chirimbolo feo e inexplicable, cumpliendo así el principal cometido de los monumentos rotonderos, que es provocar confusión mental a los conductores. En esta misma avenida o carretera hay más monumentos de esos, los analizaremos oportunamente. Es otro decir.

El género epistolar nos plantea muchas preguntas. ¿En qué momento le pareció buena idea al autor escribir esta carta? ¿Qué sentimientos le embargaban mientras lo hacía? ¿Qué pretendía conseguir? ¿Habéis intentado conseguir un fontanero un sábado por la tarde?

Hace unos días, mi padre recibió una misiva que no sé muy bien como calificar. Qué cojones, yo la he leído y ya no puedo desleerla. Acompañadme en mi dolor. Aunque antes os daré un poco de contexto. El autor es un señor casi nonagenario que ha sido vecino de mis padres durante una temporada. Además de casi nonagenario, ente onvre —al que llamaremos a partir de ahora Efe— es bastante maleducado y asocial y más facha que un Land Rover corto. Así que todos los vecinos, salvo mis padres, le habían mandado a la porra y pasaban de él. A mi padre le daba pena y le llevaba en coche cuando le hacía falta hacer algún recado fuera de la urbanización o en la capital. Recalco: mi padre es el único vecino que le soportaba y le hacía el favor de llevarle y Efe le escribe esta sarta de burradas. Ahora sí, ahí va la primera página:

Primera página de la carta
Primera página de la carta

Ignoremos por completo el uso creativo de la puntuación —y el leísmo galopante— y vayamos al turrón. El primer agravio ha caído como una losa sobre nuestro protagonista. Él se molesta en enviar una crema maravillosa —y muy española— a mi madre —sin acertar su nombre— y el paquete le ha sido devuelto. Coño, es posible que si escribes los nombres de las personas a las que quieres que lleguen tus cartas, el cartero consiga identificarlas y entregar los paquetes, Efe. Pero es que esta carta ha llegado de chiripa, porque el nombre de mi padre tampoco lo has acertado, Efe.

Pero, claro, no sabemos si le ha sentado peor que no llegara a destino la crema de aloe vera o la nota sobre el «atraco» al Banco de España. Es un pena que el paquete no llegara, porque ahora siento auténtica curiosidad sobre ese otro documento «que no recuerda», pero que sería algo sobre «fechorías social-comunistas». No sé cómo nos atrevemos a rechazar un regalo de alguien que «no es de derechas ni de izquierdas».

Se masca la tragedia. Del cordial «Apreciado amigo» del comienzo, la cosa ha llegado a mitad de la epístola a «anti-españoles», «terroristas, secesionistas, comunistas y enemigos de España». Apreciado amigo: lárgate de España.

Chico, eso ha escalado rápido

Estoy un poco desconcertado con lo de la «ideología de las naciones». Si toda una nación tiene una misma ideología, ¿cuál sería la de España, Efe? ¿La tuya o la del PSOE «social-comunista» que votaron los españoles? Debe ser que hay muchos anti-españoles y así no vamos a ninguna parte como nación. O como unidad de destino en lo universal. No se nos resuelve la cuestión, pero sí que aprendemos que Suecia, toda ella, es social-demócrata. Apuntaremos aquí que una hija de Efe tiene doble nacionalidad sueca-española y que, residiendo en España, recibe una beca de investigación de Suecia. O sea, que lo de las paguitas y el socialismo está de puta madre cuando me conviene a mí…

Se acerca el momento de la despedida y todo se precipita y se vuelve confuso. Por un lado, agradece la ayuda de mi padre y promete no olvidar. A pesar de ello, le echa en cara que viera «el mantra de derechas» (sic). Pues no sé, Efe, creo que mi padre te da mil vueltas, porque a pesar de tu facherío y gilipollez nunca dejó de echarte una mano. Debe ser que él, al contrario que tú, si que ve a la persona detrás de las ideas, aunque las ideas sean una sarta de burradas. Y he aquí que llega el agravio final. A uno de tus WhatsApps delirantes, mi padre te contestó que ya hablaríais en otro momento porque tenía invitados y estaba encendiendo la barbacoa.

¿Cómo se atreven estos putos rojos a responderme así? ¿O a tener barbacoa? ¿O quizás a comer todos los días? Block, report y aviso a Arroba Policía, hombre ya. Un cordial saludo, eso sí.

Espera un momento. ¿Qué es eso del anexo? Atentos al giro de guión.

Segunda página de la carta

No os lo vais a creer, rojazos. He conminado en hasta tres ocasiones a Rajoy para que entregue las armas y dimita. Aunque esto es otra historia que merece ser contada en un próximo post…

Banda sonora recomendada
Caminante no hay camino…

Qué curioso, hoy toca otra estatua de Santa Teresa. En Ávila somos así de originales, ya saben ustedes, si han leído entradas como el Contador de Teresas. Esta se ubica frente a la entrada del Convento de La Encarnación, en el que la Tere vivió durante sus primeros años como monja. La foto la ha hecho mi señora, por cierto, que suele pasear por aquella zona. Un día nublao, que al ser una figura de piedra oscura tiene su mérito que salga mona.

La escultura tiene su historia. En aquel tiempo postmedieval, los conventos, además lugares de castidad, pobreza y oración, también lo eran de retiro para mujeres nobles que enviudaban. En los conventos encontraban un lugar tranquilo donde terminar sus días; y a cambio de una generosa dote, tenían ciertos privilegios (criadas, visitas, wifi en las habitaciones, y otros lujos). Y todo ello sin tener que aguantar a ningún señorito pesao. Un win-win.

Esto afectó a la conciencia de Teresa, que decidió poner tierra de por medio: se salió del convento y fundó su propia órden, más austera; que comenzó en el convento de San José y la llevó a recorrer toda la geografía española abriendo sucursales. La escultura la representa así, «la santa andariega», armada con una buena garrota por si acaso, que ya en aquel tiempo había mucho gilipollas.

La empresa era peligrosa, no sólo porque que una mujer se dedicase a organizar algo era raro; sino porque sus ideas de renuncia y austeridad podían asimilarse a las de la reforma protestante; por ello fue investigada por la Inquisición, siempre con el mechero a mano. Incluso después de muerta, su figura ha dado lugar a divertidas discusiones sobre lo que una mujer puede ser o no ser.

Qué pasa, tronco

Llega a nuestra sección una de las rotondas que inaugura una serie de «rotondas baratas». La época postburbujil fue todavía peor para Ávila que la época postmedieval, y -en el tema rotondero- dio lugar a una serie de erecciones caracterizadas por la escasez de fondos, suplida con creces por una escasez de imaginación sin precedentes y -en ocasiones- con un exceso de improvisación.

En una de las rotondas de la AV-500 (Carretera de Ávila a El Espinar), cocrétamente en la intersección con las calles Cronista Ruiz Ayúcar y Av. de la Unión Europea, se ubica este tarugo (probablemente, de un olmo, aunque no lo puedo confirmar). Todo en su disposición refleja este estilo postburbuja al que aludíamos, de tal manera que el transeúnte sólo puede exclamar «pa eso mejor haberlo dejao como estaba».

En fin, el arte es todo aquello que nos causa emociones, y este tronco tirao de cualquier manera nos las causa. Así que demos por buena esta hovra, que recuerde a las generaciones futuras que alguien en algún momento pensó que eso hacía bonito. Como el tronco que hay en la rotonda del Cylog, por cierto, todavía más cochambroso.

A VER, PINTADLO DE ARCO IRIS, PONED UNA POESÍA DE MACHADO ALREDEDOR, COLOCADLO AL REVÉS CON UN NIDO DE CIGÜEÑA ENCIMA, O NO PONGAIS NADA.

Segunda unidad al 50%

Continuamos con las entradas dedicadas a Santa Teresa con un Pack Descuento. Porque, de la misma manera que a veces, cuando compras el champú, te viene emplastificao tojunto con un botecillo de suavizante de regalo, con la figura anterior (Qué he hecho yo para merecer esto) venía incluido esta otra, formando lo que parece ser un Jrupo Hescultórico. Muy disjunto, por otra parte; comparen vuesas mercedes el estilo más moenno de la anterior escultura, que parece surgir del bloque de piedra inacabado, con este chirimbolo estilo good ol’ days, que lo mismo podría parecer un monumento al leninismo que una pieza dedicada a los 25 años de paz.

Las air jordan postmedievales

He tratado de analizar e interpretar la obra, y es complicado decir algo coherente sobre ella. O incoherente. Vamo a ello. Al principio pensaba que las dos figuras de abajo eran una anunciación, pero en la wiki pone que las 3 figuras son ángeles (enzerio, yo tengo mis dudas). A ver (afoto ut supra) el que sujeta el libro está levitando, lo que ya de por sí da idea de que algún superpoder tiene que tener, pero fíjense bien en la siguiente imagen:

Fiat y no corras

El ángel de abajo -si es que lo es- no levita, es algo duro de oído y no tiene cabello de ángel como los otros (me refiero a los pelos, no al relleno de bayonesas o ensaimadas) y posa la mano en plan «puedo prometer y prometo» sobre un libro que sujeta el ángel levitador; en el libro se lee la siguiente frase: fiat voluntas tua sicut in caelo et in terra, que podríamos traducir como «Tu Fiat es como mi Seat pero en otras tierras». Por lo tanto, tampoco es una anunciación (en ese caso, la frase sería «Fiat mihi secundum verbum tuum«, que es un modelo de Fiat distinto). Podría ser -aquí va mi teoría- la propia Santa Teresa ante un notario, al formalizar el préstamo de la compraventa del coche, por ser importe superior a 30.000 €.

Si seguimos ascendiendo, veremos una posible finalidad de la estatua, y es la de servir de posadero a la fauna abulense. Un bello ejemplar de Passer domesticus nos contempla, altivo y circunspecto:

Gurriato

Para rematar la escultura, el ángel superior está sujetando… o bueno, en realidad no está sujetando, una estrella de cuatro puntas que flota sobre las ondas; es el símbolo de la OTAN, por lo que podría ser el Ángel Exterminador. Y, por cierto, ¿qué son esos brazos dislocados que aparecen trincando la estrella? ¿Las manos invisibles del mercado?

¿Josep Borrell?

Concluyendo, esto no tiene ni pies ni cabeza, pero sabemos que está relacionado de alguna manera con Santa Teresa (lo ponía en el ticket de compra). Está en un rincón algo umbrío, bajo la torre más alta de la muralla y se ha ido cubriendo de verdín por la cosa de las inclemencias, lo que le da un cierto aire de abandono, pareciendo más antiguo de lo que es. Y, lo que es peor, queda eclipsado por las demás figuras que tiene a su alrededor y la gente no se hace selfies delante de él, por lo que, además de un incomprendido, quizá sea el más melancólico de nuestra ciudad.

Cylog

Aquí está la última entrada de junio en el Ávila Road Museum, ese museo disperso por las rotondas de nuestra amada ciudad. Hoy tenemos uno de los más innovadores, el Monumento al Cylog (ojo, se pronuncia «Fronkonstin»), ubicado en una rotonda del Paseo del Cementerio. Se trata de un chirimbolo de material grisáceo, colocado excéntricamente en una rotonda cochambrosa.

Y se preguntarán ustedes… ¿Qué cohone es un cylog? Los aficionados a la ciencia fricción o a la cocina molecular seguro que ya saben que los cylogs son criaturas humanoides similares a los golem, pero hechos de patatas revolconas en lugar de arcilla, y el chem está escrito en un torreznillo. Para los no iniciados, el chem contiene las instrucciones cargadas en su cerebro biónico, que le servirían para desenvolverse en nuestra ciudad; con frases como «ponte la rebequita que luego refresca», «¿qué tienes de pincho?», «pa ir allí tardas menos andando que en coche» o «la calefacción no se enciende hasta que no lo diga la Santa».

Hay quien sospecha que algunos de los próceres abulenses (alcaldes, obispos, delegados, cuneros…) podrían haber sido realmente cylogs, infiltrados por nuestros enemigos segovianos o por los separatistas de Arévalo; programados para parecer que hacen algo, pero que realmente han estado saboteando el progreso de nuestra ciudad, dejándola inmersa en el marasmo y la atonía; todo esto desde la época postmedieval u antes. Esta teoría conspiranoica incluso defiende que este monumento, que está como camuflao y sin llamar la atención, realmente sería un portal para acceder a las dimensiones-mazmorra desde las que se controlan los cylogs.

Segunda entrada consecutiva dedicada a Santa Teresa. Esta se denomina «Qué he hecho yo para merecer esto», y a diferencia de la anterior, su ubicación ya no es al 100% en la plaza de Santa Teresa, existen dudas de si está en esta plaza, o si eso ya es el Paseo del Rastro, o si sigue siendo la Calle San Segundo, o el jardín Rodríguez Almeida. Pero vamos, que está enfrente de la otra.

Si la primera estatua de la Tere, la que corona la palomilla, la muestra un poco extática y agarrando un libro cerrao; en ésta, con su pose, parece preguntar a los cielos «por qué a mí», sin duda, refiriéndose a la dispersión de sus restos. Porque, a pesar de que cuando veía próxima la muerte pidió ser enterrada en cualquier sitio bien tapado, poco le duró el descanso. Para empezar, murió el 4 de octubre de 1582, y fue enterrada al día siguiente, el 15 de octubre. Ni el calendario se portó bien.

Inicialmente fue sepultada donde le pilló la parca, en Alba de Tormes. El obispo de Ávila quiso trasladarla a nuestra ciudad, pero no contaba con que aquella localidad salmantina, si bien de menor rango que su episcopado, era la patria chica del ducado más famoso y jrande de España, y el duque le dijo al obispo que calladito estaba más guapo. Pero lo que no pudo evitar es que empezase el despiece…

Ronda de marcadores, minuto y resultado:

  • El brazo izquierdo y el corazón, en unos relicarios junto al cuerpo incorrupto (o lo que queda), en Alba de Tormes.
  • El pie derecho, parte de la mandíbula superior y del cráneo, y varios dientes están en Santa María della Scala y San Pancracio, Roma.
  • Una mano en Lisboa.
  • El ojo izquierdo y la otra mano (que Franco conservó hasta su muerte), en un convento de Ronda.
  • Tráquea, en Nápoles
  • Clavícula derecha y uno de sus dedos, en Bruselas (Bélgica)
  • Clavícula izquierda, en el convento de San José de Ávila
  • Dedo meñique de la mano izquierda: Iglesia-convento de la Santa (Ávila)
  • Más dedos, en París (Nuestra Señora de Loreto), Sanlúcar de Barrameda, Roma (Convento de Medina Coeli), Sevilla, Gante, Amberes.
  • Una costilla en el Desierto de Sant Angelo (Lombardía)
  • Muelas, dientes y uñas, en Toledo, Santiago de Compostela, Puebla (Méjico), Milán, Nápoles Malagón.
  • Trozos de carne, en los conventos de Carmelitas descalzas de Madrid, Valladolid, Malagón, Salamanca, Segovia. Beas de Segura, Villanueva de la Jara, catedral de Nápoles, basílica de Santa María la Mayor de Roma.
  • Trozos de huesos, en los conventos de carmelitas descalzas de Palencia y Sevilla.

La escultura, para no sufrir el mismo destino, está realizada en pedrusco postmedieval del caro. Y forma parte de un grupo escultórico (al parecer, venía incluido en el precio) que se complementa con un obelisco-chirimbolo que se encuentra detrás, y que detallaremos en el siguiente post.

Bosón de Higgs

Como dijo el sabio, «la cencia no se ace sola, ahi que acerla». Y en esta rotonda, denominada Glorieta Isabelo Álvarez, se ubica uno de los monumentos más centiéficos de Ávila, el monumento al Bosón de Higgs, inaugurado recientemente. Siguiendo la moda, está realizado en fierro morroñoso; pero con la particularidad de utilizar nuestro pavimento favorito -¡el adoquín!- como medio de expresión artít-tica.

Como podrán observar vuesas mercedes, el bosón es una partícula fundamental, representada por la esfera morroñosa que saldría disparada desde nuestro LHC (Large Hadroquin Collider) para ser detectada con su campo asociado (representado por una figura envolvente espiralidosa, también de fierro morroñoso). Junto con los adoquines, hasta la señal de tráfico parece participar en este bello homenaje, indicando cómo giran los haces de partículas a velocidades rapidísmias, siguiendo los caminos marcados por los campos magnéticos y (en su caso) la policía municipal.

Las partículas pueden salir disparadas hacia la C/Canteros, al Paseo de la Encarnación, al Paseo del Cementerio en dirección Ávila, al Jardín de la Viña, a la C/Félix Rodríguez de la Fuente, o al Paseo del Cementerio en dirección al susodicho. Todo es supersimétrico en esta rotonda. Incluso los adoquines están mejor colocados que en algunas calles.